Paradojas del mundo digital: el cine recauda más y menos copyright parece igual a más beneficio social
Juan Herbera, que hace unos comentarios apasionantes sobre la taquilla de cine española en su blog semana a semana, dice algo como esto:
A pesar de las descargas ilegales, de la piratería, del auge de las nuevas tecnologías entre el target más consumidor de cine…Disfrutemos del buen momento, no bajemos la guardia en ningún caso y sepamos extraer lo positivo de todas éstas lecturas. Y, de paso, confiemos en un segundo semestre que siga en la línea del primero para cerrar lo que sería, sin duda, un año histórico.
Un servidor recibe las taquillas americanas cada semana y ve cómo la recaudación global ha aumentado. Será lo de la crisis, excusa histórica para disiparse en una sala con, digámoslo con claridad, cada vez más vecinos molestos. Mejor no les cuento la pesadilla de espectadores que no llegan a la hora y se equivocan de asientos que tuve el sábado pasado: si el cine es cultura y no negocio, ¿por qué no hacen como en la ópera y no dejan pasar a los espectadores retrasados que rompen con la religiosidad del momento contemplativo llamado cine?.
Sumado al estudio de Harvard tan poco comentado en las redes estos días (Antonio, sí; un trabajo en progreso el de Boston pero con qué etiqueta), en el que se dice con todas las de la ley que un copyright menos forzado ha mejorado a la sociedad (bien es verdad que hay que definir eso) y que la producción de obras de todo tipo ha aumentado, otros también podemos decir que es una semana de las que ponen las cosas en su sitio. Algo huele a podrido en Dinamarca con toda esta historia de la maldad intrínseca de las descargas, quieran o no quieran los popes del sistema.
El inglés con el que nos lo cuentan, es exquisito. Se empapen.