¿Qué es un resultado positivo en una televisión? (pública)
Extraigo un sencillo párrafo que se explica por sí mismo (o eso creo yo) de unas declaraciones de Rafael Camacho, de Canal Sur, que leo en Formula TV:
El resultado económico del ejercicio fue positivo al registrarse unos gastos de 187,6 millones de euros que fueron cubiertos con unos ingresos de explotación de 74,7 millones de euros y una aportación de fondos públicos de RTVA de 125,6 millones de euros.
Setenta y cuatro millones de ingresos frente a ¡ciento veinticinco! de subvención. Honestamente, pocos desfases entre ingresos y gastos tan sideral se puede encontrar. Y, honestamente, me cuesta pensar en qué se beneficia al ciudadano de una tele tan específica. Mientras, cualquier emprendedor que quiera hacer vídeo en la red (muchos programas son imposibles de encajar en una televisión convencional y hasta podría considerarse que son esos que la televisión pagada con impuestos consideraría de interés social) tiene que vivir con sus recursos mondos y lirondos. Por no hablar de temas como coberturas sanitarias y cosas por el estilo.
Es incluso sorprende el despliegue de rigurosidad financiera para decir que se pierde un montonazo de dinero. No se ve que nadie hable de resultados de otro tipo que parecen de modo natural asociados a lo público. Creo que ya va siendo hora de que alguien reflexione si tiene sentido dedicar todo este dinero a televisiones con una diferencia tan escasa, si la hay, con lo que tiene el sector privado.
Es ideal complementar esta información con la entrevista que Cinco Días ha publicado con Paolo Vasile, un tratado de gestión televisiva. Cae antipático en la red, pero deben leerle con detenimiento porque es un prodigio de racionalidad del negocio de la televisión. Y aunque da para mucho, viene que ni al pelo esto que dice con lo que tratamos hoy:
Que hayan comprado la Champions League no tiene explicación porque han pagado un precio absolutamente fuera de toda recuperación económica. Las televisiones públicas, como servicio, tienen que compensar lo que la privada no puede hacer.