Aparece en Eva y Kolegas una joven que se tatúa La vida es sueño en la cintura, me quedo obviamente de piedra y me pregunto si una serie de televisión destinada a jóvenes que se sienten jovenes – para bien y para mal – conseguirá que lean a Calderón de la Barca o se repetirán que los sueños, sueños son. La K de kolegas podría sugerir la derrota de los clásicos o la transformación del lenguaje, tomen el partido que quieran ante la duda de si lo juvenil ha detenido su bagaje intelectual de imágenes y de lo demás en 1980, o si eso es sólo la restricción de unos pocos: no era, en cambio, en la presentación de Eva donde me decían que un participante en un proyecto audiovisual de aspecto inequívocamente recién salido de la adolescencia decía que los Beatles se parecían a Oasis.
Pero sin desgarrarnos las vestiduras sobre lo que una generación puede pensar sobre otra, ese tema eterno, la vida continúa y el hecho es que Antena3 insiste en su política de riesgo creativo en Neox. Con él, su acercamiento a los juegos narrativos y de distribución en plataformas cruzadas, televisión e internet. Al
ya conocido trabajo de
VU87 añade ahora una serie de ficción orientada al mismo público y con la excusa del videoblogging como argumento para contar cosas de nuestro tiempo: si en VU la videoblogger va a la caza de contenidos guardados en cajones y escondidos en lo más profundo de la red, en
Eva y sus Kolegas el videoblogging es la estratagema para contar historias.
La idea y el trabajo es de
Rojo Vivo, el resumen de los contenidos está ya disperso por la red, y una excelente reseña de su dimensión creativa puede encontrarse en casa de
Chica de la Tele. En su labor como productores han configurado un equipo creativo capaz de llevar a cabo una realización sugestiva, buenos guiones y un producto fronterizo e innovador de muchas cosas que pretende explotar todos los elementos de la comunicación que llamaré
actual para no caer en etiquetas basadas en ediciones sucesivas de programas de software.
El primer aspecto destacable es el diseño de consumo que se ha realizado: una emisión diaria de lunes a viernes de episodios sueltos, una reedición en sábado con los episodios agregados, más su presencia en YouTube. Antes de lanzarse, la web de la serie – alojada en el site de Antena 3 – ya contiene webisodios con andanzas de los personajes, en un estilo muy introductorio de los personajes. Como siempre en nuestro estado de mercado, falta ver (o conseguir) si es posible contratar ingreso publicitario para todos los canales por los que se puede consumir. Falta por ver si es posible encontrar patrocinio.
En segundo lugar, me ha interesado mucho el hecho de que la serie incluya personajes de más de un acento en español. Es verdad que refleja la realidad social española la inclusión de personajes latinoamericanos, pero me parece un elemento que no he logrado confirmar si estaba o no en la mente de los creadores o, vaya usted a saber, si de la cadena, a la hora de hacer un guiño a las audiencias en español que están en la red. Tengo mi particular teoría de que el público objetivo de la serie disperso por la red y que la misma red en español, tiene en su audiencia muchos más valores comunes que los que no están en ella. Crear productos que puedan ser consumidos por toda la red en español, es lo que crearía masa crítica para abordar determinadas producciones, y es encontrar valores e intereses comunes lo que sirve para encontrar el público.
El tercer y último rasgo de interés es la involucración plena con la red y el calentamiento del público a través de internet. «Eva», comportándose como un personaje que fuera real, lleva semanas agregando usuarios en
twitter, Facebook, y
MySpace, creando una interacción real de la ficción con el público completamente espontánea. Va a ser interesante cómo evoluciona esto durante la emisión. ¿Debería Antena3 publicitar en antena el twitter de «Eva»? Sería una de las cosas más interesantes que podrían ocurrir en el proceso de creación de la nueva televisión…