Dudas y miradas agridulces sobre el estreno de Planet 51 en USA

Con todo, la proyección que cita el boletín electrónico madrileño en el que se pronostican 70 millones de recaudación parece optimista. Válida o no, lo que no es cierto es la afirmación subsiguiente: que bastarían para amortizar la película. En mi opinión, los productores tendrán suerte si reciben algo de dinero del estreno americano a la espera de lo que den las ventas de DVD.
Para los que no conozcan las cuentas de una película en salas (algo que, generalmente, genera mucho desconcierto con el cine español con determinadas comparaciones), lo primero que debe tenerse en cuenta es que el exhibidor se queda de promedio la mitad del conjunto de la recaudación. Además, debe restársele el fee que cobra la distribuidora por su trabajo- que se minora, claro está, de los ingresos – más los gastos de promoción y copias e, incluso, los intereses que la financiación de todo ello exige.
Las ventas de DVD están subiendo en EEUU y guardan relación directa con el resultado de taquilla. Las ventas mundiales también tienen su correlación con el lanzamiento americano. Con un rendimiento por copia que bordea los cuatro mil dólares, muy inferior a los diez u once mil que de memoria recuerda de UP, no se puede decir que sea un lanzamiento espectacular. La película competía con Luna Nueva (el viernes de mayor recaudación de la historia) y no tiene versión en 3D en un momento en el que el negocio de la animación está ya inmerso en ese cambio, un cambio que mejora los ingresos ante el incremento del precio de la entrada.
¿Cómo terminará este revolucionario proyecto, el intento de competir o, al menos, reproducir las prácticas del entretenimiento global realizado por los grandes conglomerados norteamericanos hecho por la periferia del sistema, una empresa española? Si lo miramos desde el punto de vista del negocio cinematográfico, el resultado no es ni muchísimo menos bueno. Puede ser más bien ruinoso. Pero la esencia, visto desde el punto de vista de la nueva industria audiovisual, es hasta qué punto el lanzamiento genera el desarrollo de una franquicia de personajes e historias que sirva para vender juegos, licencias, móviles y músicas, un negocio mucho más lucrativo capaz de generar secuelas y un nuevo ciclo de ventas de productos asociados. Por supuesto, esto también es dependiente del éxito en salas, verdadero catalizador para la creación de marca.
Ser un Pixar desde fuera de la galaxia es, sin duda, lo suficientemente difícil como para quitarse el sombrero ante la osadía de Zed Multimedia. Serlo con una sola película más difícil. Para tener continuidad y palanca a la hora de negociar la distribución (es decir, lista de espera de las grandes distribuidoras para hacer negocios contigo) necesitas tener éxitos incontestables. Creo que en Zed tienen una visión acertada en la forma de entender el negocio pero, como todo el mundo, están sometidos a las caprichosas leyes del éxito de audiencia. ¿Por qué vía continuarán?
Hay una parte en que los hermanos Dolset han innovado.
Han adelantado la pasta y no hay reparto con distribuidora, ellos distribuyen la película y gestionan la totalidad del ingreso después de la sala.
Es un nuevo modelo de distribución en un mundo antiguo y lleno de intermediarios como tu reflejas.
Hasta donde yo sé, eso en EEUU no es así. Y, de haberlo hecho, tampoco sería original. Es más, si mis noticias son ciertas, las condiciones de distribución son bastante duras. Distribuir con las grandes no suele ser nunca un buen negocio.