Menos lobos otra vez en el cine: menos caídas y más estabilidad
El avance ayer de los datos de recaudación del cine español en los mercados internacionales ha vuelto a desatar el ciclo de informaciones catastróficas habitual en el sector. No se corresponde con la realidad y lo vamos a explicar de nuevo.
Con la taquilla nacional, pudimos comprobar que los datos de cierre del último año se correspondían con la lógica de mercado del cine español si mirábamos la serie de datos con una perspectiva de más de un ejercicio. Todo eso a pesar de la algarada de la prensa que, cuando se produjo este año el (contrario y positivo) efecto Torrente, no rectificó. No implica estar satisfecho (aunque tampoco es nada excepcional la cuota de mercado española comparada con otras cinematografías nacionales en sus mercados), sino no atribuir lo que no es.
Con la taquilla internacional, sucede exactamente lo mismo y basta con mirar este gráfico que he realizado yo mismo con los datos que ofrece el Panorama Audiovisual de Egeda de 2010 (con cifras hasta 2009) al que he añadido la cifra publicada por la prensa para el cierre del ejercicio pasado:
Aclaró Pedro Pérez en la rueda de prensa que la comparación con el año 2009 debe tenerse en cuenta el efecto de Planet51 que por sí sola acumuló cincuenta millones de euros. Hagamos el ejercicio de quitarle al año 2009 el efecto de Planet51 y lo que nos encontramos es esto:
No es otra cosa que, con una producción más normal, seguramente por el efecto de Celda211, ha recuperado la media de todos los años recogidos en la gráfica, unos noventa millones de euros anuales. Debemos precisar que no he hecho ajustes por inflación ni cosas por el estilo, pero creo que podemos sacar unas conclusiones menos catastróficas y sí más parecidas a la realidad del cine nacional: business as usual.
Y esa es, por sí misma, la crítica más seria al sistema y a la industria española. No es que se la pegue o le vaya fatal, sino que siempre le va igual tirando a mal. Que no cambia su tendencia real aún pasen años y años: que demasiados pocos títulos que aparecen casi por arte de magia concentran la medida del éxito y el fracaso de una industria en su conjunto que busca desesperadamente su legitimidad social. Encontrar legitimidad social yo creo que empieza por explicar bien las cifras: Fernando Trueba decía ayer que sólo son noticia cuando las cosas van mal y que acumulan un montón de referencias negativas. No sé si es tan difícil, y que me perdonen: el cine tiene muchas cosas mal, pero lo que se puede explicar bien y argumentos tienen, debe explicarse bien.
Algo falla: yo he sugerido, desde este sitio que no lee casi nadie y en un ataque de narcisismo propio de un blogger que se precie de serlo, mayor presencia del cine español de medios de expresión propios (para no llamarle blogs). No es una cuestión de audiencia, sino de contextos y referencias: lo que hayan explicado ayer en rueda de prensa no sólo ha ocultado el motivo de la reunión (los screenings donde se ayuda a vender a los productores fuera) sino que ha sido contado y editado por medios que, como ven, no se toman la molestia de entender las cifras poniéndolas en contexto. Para lo que tienen de malas y lo que tienen de buenas.
Y ahora veremos como el mundo de la red, que ya es casi todo, reenviará y comentará por doquier las noticias del batacazo sin que haya un enlace con la versión completa de los afectados. Es imposible que una explicación alternativa que se enlace bien y que abandone los tonos plomizos de las notas de prensa caiga en saco roto. De paso, se acostumbra uno a debatir con la sociedad en otros términos.
No me entretendré en la otra oleada de fenómenos mal contados: la liquidación de las subvenciones que son las que marca la ley, nada excepcionales y completamente normales, ha sido planteado como una especie de nuevo privilegio, cuando no ha pasado absolutamente nada. Pero eso también se puede explicar bien, aunque haya medios dispuestos a criticar lo que no tiene sentido y olvidarse de lo que sí lo tendría.
buenísima explicación, gracias! saludos de Costa Rica, Hilda
Gonzalo, creo que coincidimos en muchas cosas ( tal vez por ello te leo ).
Especialmente interesante me parece la anotación sobre la poca reflexión que se produce cada vez que hay una avalancha de datos y la eterna complacencia con lo que nos cuentan. Si el análisis ya lo ha hecho otro por qué voy a gastar mis neuronas…se impone el COPIA Y PEGA.
Gracias, con post así te seguiré leyendo no te quepa duda porque busco personas con personalidad e ideas propias.
Fernando, Madrid
Capaz de hacer lo mismo para explicarme las ayudas a la amortización complementaria???
Se puede consultar en el texto legal correspondiente, accesible en la propia web del Ministerio de Cultura que contiene muchísima información.
[…] el peor de los males, que esa industria, que tanto se persigue y que nunca llega, vive en permanente estado de business as usual. tags: Antonio Carballo, cine español, cineinforme, ignasi guardans Anteriores » En […]