Ya está confirmado: Netflix compra los derechos para el primer pase de la nueva serie de David Fincher (nominado por la Red Social) y Kevin Spacey (oscar por American Beauty y Sospechosos Habituales), el remake de su equivalente inglés House of Cards. Que un servicio online (y de alquiler de DVD físico) como Netflix compre los derechos de una serie original no estrenada en ningún otro medio es un antes y un después: ya no hay diferencia con una cadena de cable convencional. Si un día emite streaming en directo – por qué no – la diferencia con la televisión convencional tampoco existirá. El mundo sigue cambiando a toda velocidad. Videonuze analiza de qué forma Netflix supera las contradicciones aparentes de tomar esta decisión. Aunque, desde luego y como hacen notar, no es exactamente cooperar dentro del ecosistema de la industria. [PD: Este asunto lo comentamos ya cuando apareció el rumor y a raíz de las reacciones]