La Escuela de Comunicación de Annenberg, en la vanguardia de casi todo, acaba de presentar su modelo de estimación de taquilla basado en twitter. Dicen que funciona. Si tiene o no que ver con lo que Hewlett Packard presentó hace un poco más de un año con conclusiones aparentemente similares, no queda aclarado (en esencia, que funciona, que funciona bien y que las regresiones cuanto más sencillas y con menos artificiosidades de análisis de sentimiento, mejor). Pero lo más interesante son dos cosas. La primera, la excelente visualización de los datos que presentan (con sentimiento incluído) que permite entender lo que ha pasado en el fin de semana perfectamente. La segunda, una tendencia que parece emerger: el poder de los medios sociales en tiempo real para conducir a los consumidores al producto audiovisual hacia su primera ventana, allá donde la máxima rentabilidad se decide. Esta es la estrategia para el prime-time, por ejemplo, de Play Television – la empresa de Globomedia – y es la pregunta que hay que hacerse en el cine: ¿viendo los primeros muestreos puede actuarse a nivel de comunicación sobre la marcha para reconducir mercados críticos y condicionar el último momento, la llegada a la sala? Recordemos que pueden organizarse geográficamente los twits. ¿Una técnica para paliar daños y para empujar todavía más los éxitos?