Esta mañana Ignasi Guardans  ha creado una serie memorable de citas en Twitter extraídas del número de la revista Cineinforme – el clásico del incansable Antonio Carballo – dedicado a su cincuenta aniversario. Tenía mi ejemplar en la mesa sin retirar su celofán protector, así que me arrojé a él repleto de curiosidad. Si Guardans destacaba cuestiones absolutamente deliciosas de lo que es un puro cuéntame de la cinematografía española, hay otra serie de titulares que merece la pena mirar. Para reflexionar: básicamente, se sigue hablando de lo mismo. El que fuera Ministro de Información y Turismo, Alfonso Sánchez Bella, declara en 1972 : “La cinematografía ha de organizarse como una auténtica industria”. De paso, resulta llamativo recordar que, con el franquismo, también había subvenciones para el cine: ¿esto da o quita argumentos?. Se aceptan opiniones. “Medidas de seguridad establecidas por la MPAA para combatir la piratería de copias mundial”, se dice en 1975. Lo siguen intentando. En 1978 en una carta titulada “Los problemas del cine español” remitida por un grupo de especialistas a las autoridades, se pide apoyo de RTVE, medidas para la defensa de la competencia frente al cine americano, el control de taquilla, etc. En 1979 nos saludan con “Difícil panorama para el cine español“. 1980: “diagnósticos para salir de la crisis“.  1981: “Emprender la producción de una película es hoy, más que nunca, una auténtica aventura“. U otro de los destacados por Guardans: “La SGAE manda un telegrama a Felipe González para que frene la piratería de vídeo en España“. Se toman otros años y reaparecen los mismos temas. En definitiva, que podría titularse con ellos a día de hoy y seguramente nadie notaría la diferencia. Y este es seguramente el peor de los males, que esa industria, que tanto se persigue y que nunca llega, vive en permanente estado de business as usual.