Antonio Ortiz me decía a la salida del Meet the Experts dedicado a cine y televisión que me veía algo aburrido: el argumento era que, en el fondo, siempre terminábamos hablando de lo mismo pero que, me señalaba, había mucha gente para la que los temas eran nuevos. Es posible. Es muy posible. Un servidor se debate entre la duda de seguir hablando de lo mismo o terminar de una vez por todas porque la argumentación es un bucle infinito en el que está todo dicho. Es más, y perdón por la petulancia, pero las ideas esenciales se van cumpliendo: la piratería no se detiene (y no porque los gobiernos no regulen, sucede lo previsto cuando se dijo que no iba a funcionar), las ventanas se reducen, los precios del mundo físico son una invitación al consumo irregular, los productos se extienden fuera de su plataforma inicial se quiera o no… y el pensamiento público de la industria es el mismo, repleto de contradicciones sobre su propia ineficiencia pero cargando contra lo imposible. Hoy me encanta ésta: es del dueño de los Verdi. A saber: primero la culpa es del empedrado (“no cree que el precio sea un elemento disuasorio a la hora de acudir a una sala y centra sus críticas en el IVA y en la falta de política del Gobierno contra la piratería”) pero después se niega el efecto: “El documental Searching for Sugar Man lleva 13 semanas en cartel y no ha perdido público, incluso viene más gente a las sesiones más caras”. Y está simultáneamente en Filmin, es decir, en internet – legal y más barato – y en salas a la vez. Ah, es el valor percibido del producto lo que, en el fondo, podría ser la razón final por la que la gente acude a determinados consumos. Ustedes dirán.
25 mayo, 2013 12:25 PM
1. Escrito por Isabel
25/May/2013 a las 9:09 PM
Ah, el valor percibido… A los que estaban ahí no parecía preocuparles, no estaría mal que se preguntaran en qué medida ha contribuido al cambio de hábitos. Del último enlace me quedo con esto: “No somos nadie sin los espectadores” (…) “Algo grave está pasando, estamos en situación de alerta”. Pues a buenas horas. Está claro que quejarse y pensar son cosas diferentes.
2. Pingback por Una propuesta normal | Proxecto Máscaras
27/May/2013 a las 1:17 PM
[…] otro lado, señalaba Gonzalo Martín las contradicciones de nuestra industria audiovisual, que iba para nueva pero no ha conseguido […]
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27/May/2013 a las 6:11 PM
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4. Escrito por Montecarlo
28/May/2013 a las 12:06 PM
Gonzalo, yo casi estoy por no darle más vueltas a la cuestión porque, como tú dices, es una manera de enquistarse. Al fin y al cabo, “la vida sigue”, y unos llegarán antes que otros pero todos nos veremos en el futuro (más o menos cercano).En nuestro caso (y digo nuestro porque sé que en esto coincidimos plenamente) es más provecho hablar de lo que hacemos o de lo próximo que haremos: no por olvidar el pasado, sino por aprovechar el presente para construir mejor ese futuro al que nos dirigimos. ¿Te apuntas?
5. Escrito por Joana
28/May/2013 a las 1:45 PM
La clave para mi es: Contenido de Calidad + valor añadido
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31/May/2013 a las 9:20 AM
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9/Jun/2013 a las 11:21 AM
[…] las televisiones y eso limita el espectro muchísimo.” Ya tenemos, por tanto, una de esas contradicciones deliciosas que – seamos justos – todos tenemos: las televisiones, como la realizadora, también […]