"…Será esa red social la que les dé vida", recetas de mileuristas para el vídeo online del mañana
¿Es un programa de cocina o es un monólogo de humor? ¿Un canto a la supervivencia del pobre-pero-honrado? ¿Estudiantes en sus mejores años tratando de mantener un decoro en el comer, ese comer que casi queda ya en el saber de las abuelas? Como poco, es otro fenómeno de audiencias relevantes en la red, de ideas que alcanzan notoriedad (la red sorprendiendo siempre en su originalidad colectiva), que contienen la imperfección de lo amateur y su frescura y cercanía, la sensación de estar metido en tu propia casa y que seguramente es mejor que una producción «elaborada». En todo caso, y con esas limitaciones, no deja de ser un producto vídeo y un producto web. Mi gastrónomo favorito en la red es El Cocinero Fiel, como todos ustedes saben si me siguen: esto es otra dimensión de la cocina, es la cocina de nicho y de guerrilla y que debe de saber muy bien.
Como producto, adquiere una dimensión más apabullante al ver que quienes están detrás son jóvenes emprendedores de la red que han lanzado su propio periódico ciudadano y que, para las cosas del llantar, además de hacer vídeos (cuyas recetas, supongo, se comerán al terminar, pero no les voy a pedir que confiesen) venden sus servicios profesionales. Una conversación con Pau Llop, alma de periodista y hombre 2.0, es sencilla porque tira de oficio y le deja a este escribiente con poca tarea pues, les juro, hasta los enlaces me ha dejado puestos.
Recetas Mileuristas (qué gran título) aparece con el logo Bottup. ¿Qué relación tenéis con el portal? ¿Es periodismo ciudadano o el proyecto forma parte de la estructura de Bottup?
La relación es absoluta por varios motivos. El protagonista de las Recetas Mileuristas, Toni Ortiz, es uno de los periodistas ciudadanos de Bottup. Los dos primeros capítulos los rodamos pensados como un contenido más para Bottup, y en Bottup se publicaron (1, 2). Luego, desde Nxtmdia, decidimos que teníamos que darle vida propia a Recetas Mileuristas, y la mejor manera era cogiendo el dominio y creándole un espacio propio. La relación actual con Bottup tiene un doble sentido: por un lado ambos ‘productos’ son de Nxtmdia, y por otro forma parte del experimento de Recetas Mileuristas ver si somos capaces de convertir parte de su audiencia pasiva en usuarios activos de sites avanzados en participación como es el caso de Bottup.
¿Veis posible, incorporar patrocinadores? El posicionamiento en precio me parece ideal para algunas empresas que quisieran hacer una comunicación osada dirigida a un público como el vuestro.
No hemos intentado nada por ahora. Es extremadamente difícil establecer un canal de comunicación con las marcas si no eres ‘uno de los grandes’. En cualquier caso, aunque no lo hayamos hecho aún, sí lo hemos pensado y si el programa sigue evolucionando bien, habrá que intentarlo. Lo que sí tenemos claro es que cualquier tipo de monetización del programa nunca pasará por publicidad en el site propio, sino en el propio vídeo.
Con Jack Lab, siempre ahí para la reflexión sabia y el dato relevante, hemos comentado muchas veces la necesidad imperiosa de contar con una agencia especializada en micromedios. ¿Tiene Pau el coraje para ponerlo en marcha? Un guante que arrojo.
¿Son los mileuristas un público para la publicidad?
El target de los 18 a los 35 años es uno de los más golosos. Nuestros vídeos no los ven sólo mileuristas: también inframileuristas, pero también milquinientoseuristas y más. No cuenta tanto el poder adquisitivo del individuo en sí como el de sus necesidades como grupo. Un buen ejemplo es el colectivo de inmigrantes, que ya empieza a ser un target muy codiciado. En nuestro caso, sería absurdo anunciar productos financieros sofisticados, pero no sería ninguna tontería anunciar páginas web tipo ‘Match.com’, agencias Low Cost, operadoras móviles virtuales, videojuegos, películas o series dirigidas a este público, etc.
¿Cómo grabais? ¿cómo editais?…
Muy simple. Usamos una vídeocamara Sony Handycam miniDV modelo HC23E. Me costó 250 euros hace año y medio. Para editar, Adobe Premiere elements, que venía de serie con mi portátil. Grafismo, como habrás visto, es casi nulo, hecho con el propio titulador de ese programa. Para grabar el mayor problema que tenemos es la disponibilidad de Toni, que anda muy liado últimamente con su master. Cuando es el día, simplemente decidimos que vamos a cocinar, compramos los ingredientes pensando en cuánto costará por cabeza (siempre menos de 2 euros) y nos ponemos a ello. No hay guión, ni escaleta ni nada. Acordamos lo que va a decir en cada toma. Grabamos eso y cuatro recursos y el resto en el montaje. El gasto de producción de cada programa asciende a unos 4 euros más o menos, sin contar el tiempo. A 20 euros la hora de ‘trabajo’, el coste sería de unos 70-80 euros en total.
¿Vuestra formación audiovisual?
Poca. En mi caso, estudié Periodismo, algo de audiovisual tuvimos, hicimos algún minidocumental informativo en la facultad, pero poco más. Luego en la práctica sí hemos hecho más cosas, varios vídeos y reportajitos informativos para Bottup, sobre todo crónicas de manifestaciones y entrevistas, pero con las mismas herramientas.
¿Sois todos mileuristas? ¿Qué hacéis para comer «de verdad»?
Menos que eso, somos inframileuirstas. Toni es estudiante y Christian González (mi socio en Nxtmdia) y yo vivimos de pequeños (por ahora) trabajos que hacemos de consultoría en nuevos medios digitales. Nuestro objetivo es lograr desarrollar el 100% de Bottup y hacerlo, a la larga, un medio social rentable y que nos permita ir haciendo realidad todos los proyectos que tenemos en mente a través de Nxtmdia.
¿Cuál es el futuro del audiovisual en la red?
La respuesta más sensata sería: «Ni idea». Pero como hay que mojarse, yo diría que la clave está en los microcontenidos, en los productos específicos, de nicho. Creo que todo apunta hacia un ‘ecosistema’ que permita el surgimiento de muchas ‘nanoproductoras’ audiovisuales digitales especializadas en temas, nichos, targets. Creo que el audiovisual en Internet se consumirá de manera muy diferente a la TV. Creo que se hará vídeosnacking, vídeos cortos para ver en el autobús con el móvil. Serán como pequeñas piezas que cada usuario encajará en su propia parrilla-puzzle a través de feeds, widgets, etc. No creo en la concentración, ni en macrosites que alberguen muchos contenidos generalistas. Cuando se supere el problema del almacenamiento, Youtubes y similares perderán fuerza. Las productoras estarán en condiciones de ser el canal y deberán crear red social en torno a sus productos audiovisuales, y será esa red social la que les de vida. Se sustituirá la audiencia por los usuarios. Y los usuarios usan. Habrá que darles herramientas y pensar cada programa, cada producto, atendiendo a esa realidad.
La mala noticia del día es que Stage6 cierra su portal de videos de alta calidad.
http://www.stage6.com/
Bueno, ese cierre es decepionante para los que veían películas de alta calidad por la red, pero es totalmente lógico y contribuye a clarificar el mercado.
Con el lanzamiento masivo de sitios de descarga, incluso con alta definición, como AppleTV, Netflix, Vodoo o la asociación Tivo/Amazon, no hay mucho espacio para competir en un sito que – démonos cuenta – no tiene ingresos.
Y que tiene muy difícil conseguirlos. La razón de ser de su dueño no es luchar en el mercado del video online generado por usuarios, donde está todo el pescado vendido, ni siquiera lo es competir en gran consumo con los deals con las majors de los que hemos citado, sino vender códec de vídeo.
Si les ha servido para extenderlo y popularizarlo, habrán hecho algo bueno. Y se quitan un montón de problemas. No era su negocio.
Interesante concepto de nanoproductoras audiovisuales. Buena entrevistra Gonzalo 🙂