Están advirtiendo los sabios del marketing en medios sociales que este año 2010 debiera ser el del social media business. En otras palabras, menos fans y más conversión. En el cine americano empiezan a llamar la atención sobre ello: grandes éxitos de trailers en youtube y poca traducción en venta de tickets. Después de todo, si hay un marketing cruel es el del cine, hacer marca no tiene ningún sentido y todo consiste en sacar a la gente de casa y que pague una entrada justo el fin de semana que tiene que hacerlo. Una descripción amplia invitando a olvidar métricas como los “me gusta” y otras por el estilo para pasar a “compra la entrada” la hace Chris Thilk en Advertising Age.