A quien se deja, le cuento que un blog es lo que tu quieres que sea. Hay dos cosas que son para lo que yo lo quiero: una, me la enseñó Juan Freire. Sirve para saber lo que pienso. La segunda, es porque me sirve para recordar enlaces a textos y vídeos que, de otro modo, olvidaría o no sabría donde encontrar. Nunca se me dió bien Delicious. Cada semana o cada tanto en tanto, se me quedan pestañas del navegador abiertas con cosas que contienen algo que me interesa y para las que nunca termino haciendo comentario. Menos sufrimiento para el lector habitual. He decidido encadenarlas en entradas como ésta que, para hacerlo consistente, debieran ser semanales, pero que el cuerpo me pide que sean cuando ocurra. Tengo unas cuentas de los últimos días: leo a Manuel Cristóbal decir “yo no hago cine español. Yo hago cine en España. La marca cine español no me interesa” y aplaudo. Encontré una excelente infografía sobre televisión social gracias al blog de grandes clientes de Telefónica. Tim O’Reilly, que me dijeron que estuvo plomo en Ficod, deja un mensaje importante en su visita a Madrid: “No deberíamos preocuparnos por la piratería, deberíamos preocuparnos por Amazon” El riesgo está en los formatos propietarios y su conducta monopolística. Me gustó cómo Javier Guerreira sugirió que el spot de loterías de este año podría convertirse en un largometraje, toda una propuesta de cómo las marcas pueden – y, seguramente, deben – convertirse en editoras de contenidos, idea que Albert Gª Pujadas ha explicado estupendamente bien hace unos días.