Hace un poco más de un año localicé una premonición de Luis Eduardo Aute. De modo resumido, aseguraba que en cinco años no quedaría música por culpa, ya saben, de los bucaneros. El inicio del mes de diciembre trajo el cuarto aniversario de la declaración: como se puede comprobar, la música sigue. Hasta el extremo de que Spotify no se detiene y llega a Colombia además de decidir que la ofrecen gratis en los dispositivos móviles (¡pardiez! ¡gratis!). En un año, veremos si celebramos el hecho de que todos los cataclismos anunciados sobre la cultura se producen o no. Mientras tanto, Avatar, la película que el nada sospechoso diario La Razón, entre otros, califica como película más taquillera y más pirateada de la historia, se emite en Telecinco con desbordante éxito (¡gratis!). Su flamante Director General de Contenidos, el Sr. Villanueva, proclamaba exultante el éxito de su cadena y daba seis millones de gracias por cada uno de los espectadores que Kantar dice que tuvo, nada menos que un 32% de share en lo que han considerado el largometraje más visto en los últimos trece años. De verdad, la piratería es fatal.